Los impuestos que configures en tu tienda en línea pueden aplicar de dos formas sobre los productos y/o servicios que tenga tengas cargados en tu tienda:
- Impuesto incluido en el precio de los productos y/o servicios: Esto quiere decir que los precios que le cargaste a tus productos y/o servicios ya vienen con el impuesto incluido, por lo tanto, la plataforma tomará ese precio para desglosar lo que corresponde al precio bruto y lo que corresponde al impuesto. En los productos, tus clientes visualizarán el precio total del mismo, es decir, el precio que le cargaste al producto, sin embargo, al momento que un cliente esté realizando un pedido, el precio le aparecerá de forma desglosada (el precio bruto del producto y el precio del impuesto). Aplicar el impuesto de esta forma permite que el precio del producto siempre refleje su precio total y que durante el proceso de compra del cliente este no se incremente debido al impuesto.
- Impuesto NO incluido en el precio de los producto y/o servicios: Esto quiere decir que los precios que le cargaste a tus productos y/o servicio NO vienen con el impuesto incluido, por lo tanto, los precios que vean tus clientes en los productos serán el precio bruto y cuando los agreguen al carrito, se les adicionará el impuesto correspondiente. Aplicar el impuesto de esta forma puede generar fricción, ya que esto significará un incremento en el precio total al momento que el cliente realice un pedido. Sin embargo, esto también dependerá de tu modelo de negocio y de cómo lo estés aplicando actualmente con tus clientes.
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